Dylan asistió a la Facultad de Derecho de la Universidad de California, Hastings, en San Francisco, donde fue un distinguido miembro del equipo de competición de juicios de la escuela. Como miembro del equipo, Dylan ganó la competencia anual de juicios simulados de la Asociación de Abogados Litigantes de San Francisco y quedó en segundo lugar en la competencia anual de la Universidad Golden Gate, además de ser premiado como el mejor abogado oral en su clase de Tribunal Supremo simulado.
Dylan también fue presidente de la organización Servicios Legales para Personas Sin Hogar, donde se ofreció como voluntario para proporcionar servicios legales gratuitos a los residentes del refugio para personas sin hogar más grande del norte de California. Por sus esfuerzos, Dylan recibió el Premio al Logro Sobresaliente en Pro Bono, una distinción otorgada a los estudiantes que completaron más de 150 horas de trabajo pro bono. Dylan también recibió el Certificado Wiley W. Manuel por Servicios Pro Bono otorgado por el Colegio de Abogados del Estado de California.
Después de graduarse con honores de la Facultad de Derecho de la Universidad de California, Hastings, se unió a un destacado bufete de lesiones personales donde llevó varios casos a juicio, incluido un caso de lesión de médula espinal con responsabilidad disputada que resultó en un veredicto de cuatro millones cuatrocientos mil dólares ($4,400,000.00), que fue el decimocuarto veredicto más grande por accidente automovilístico en California en 2018. Cuando surgió la oportunidad, Dylan dio el siguiente paso en su carrera y se unió a la práctica legal de su familia. Fue distinguido tanto en 2020, 2021 y 2025 como una Estrella en Ascenso por la Revista Super Lawyers, una distinción otorgada solo al 2.5% superior de abogados en California con menos de diez años de práctica.
Desde que se unió a la práctica familiar, Dylan llevó un caso como abogado principal que resultó en una adjudicación de $10,205,904.00 para una niña atropellada por un automóvil que sufrió una lesión cerebral traumática y en su primer juicio juntos como dúo padre e hijo, un jurado devolvió un veredicto de $8,449,723.92 para nuestro cliente que fue atropellado por un automóvil y resultó en cirugías de tobillo, rodilla y espalda. Dylan fue el abogado principal en el caso Brown v. Beach House Design and Development que llevó a una decisión de la corte de apelaciones que fue uno de los desarrollos más favorables en la ley para lesiones laborales en la construcción en una generación y consistentemente obtiene acuerdos de siete y ocho cifras para sus clientes siguiendo la famosa táctica diplomática de Theodore Roosevelt: “Habla suavemente y lleva un gran palo; llegarás lejos”. El Sr. Roosevelt describió esta estrategia como “el ejercicio de una previsión inteligente y de una acción decisiva lo suficientemente avanzada antes de cualquier crisis probable”. Como defensor que maneja casos desde la lesión hasta el juicio, ese es su principio rector.
En su tiempo libre, a Dylan le gusta el boxeo, ver música en vivo y leer casi todos los géneros de libros que pueda encontrar. También fue cervecero profesional antes de convertirse en abogado y le gusta ir a cervecerías y destilerías en todo el país. Es fanático de toda la vida de los Los Angeles Kings, le encanta ver las carreras de motocicletas MotoGP y disfruta coleccionar camisetas vintage de Hawai y carteles de conciertos de lugares históricos. Si lo ves por ahí, es probable que lo veas usando uno de sus sombreros favoritos Stetson Open Road que fueron popularizados por el presidente Truman y el presidente Johnson.
